| ¡Buenas noches!
Hoy me he permitido enviar este mensaje por la noche específicamente, dado que algunas personas hoy han aprovechado la festividad de San José para descansar, y su semana empieza el martes.
Y digo permitirme, porque a veces me doy cuenta de que tomo decisiones conscientemente, y otras por comodidad o inercia, inconscientemente.
Según yo la percibo, la conciencia es aquello que nos permite elegir un nuevo camino, con todo nuestro conocimiento disponible, y nuestra intuición conectándonos con el corazón.
Y la calidad de nuestras decisiones respecto a nuestra vida, suele ser acorde con nuestro nivel de conciencia.
Por ejemplo, un niño puede encontrarse en una habitación con un candelabro encendido sobre un mantel, y acercarse curioso para tirar de la tela, sin darse cuenta de que la llama puede quemarle.
Del mismo modo, un adulto que no comprende las consecuencias de sus actos, puede decidir dejarse llevar por la ira y atacar cuando es atacado, sin comprender que tal vez la otra persona se siente tan atacada como él mismo.
Sin embargo, de las muchas situaciones que enfrentamos en la vida, es poco habitual que nos dejemos ser plenamente. Y es que hay veces que nos permitimos ser, y otras veces nos lamentamos de lo que somos.
Una herramienta que aprendí hace ya tiempo, cuando leí el libro "El poder del Ahora", y que es útil para aumentar el nivel de conciencia en el que estamos, consiste en observar nuestro estado interior.
Siempre que algo nos remueve, nos inquieta, o saca nuestro dolor o las emociones negativas, sólo necesitamos observar, estar atentos, sentir plenamente el enfado, el dolor, la rabia, el miedo.
Si ponemos atención y tratamos de no reaccionar impulsivamente, tal vez descubramos que tenemos derecho a sentirnos así, y a expresarlo, pero también que no es necesario reaccionar y devolver el daño.
Pero si no somos capaces en ese momento, a veces lo mejor que podemos hacer es aceptar las consecuencias de nuestros actos, pues de la aceptación de nosotros y de los demás, es de donde puede nacer el amor.
Si alguna vez sientes que asoma en ti ese lado oscuro que todos tenemos, te animo a observarlo, porque la luz de tu conciencia puede transformar toda oscuridad en un lugar claro y amoroso.
Y tal vez descubras que la oscuridad es sólo la ausencia de luz, la luz que aparece cuando estas presente.
Te deseo una semana maravillosa, llena de amor, significado y propósito.
Un afectuoso saludo,
Manuel
P.D.: Si te apetece, te espero mañana en la charla "Los mensajes escondidos detrás de la enfermedad", tienes toda la info abajo. ¡Un abrazo! |
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