¡Buenos días!
Un nuevo lunes, y un nuevo cielo en lo alto, azul, brillante, con promesas de aires nuevos, de cambios, de primavera.
Y es que la primavera se acerca. Estación de nacimiento, de fertilidad, de creación, de renovación.
La naturaleza viste sus mejores galas, y todo nos invita a salir, a disfrutar, a conectar.
Pero mientras llega, aún quedan unos días de cambio, en los que el invierno va desapareciendo, dejando atrás el frío, el hielo, los días grises, los momentos oscuros y de interiorización.
Y hay que entender que todo es un proceso de transformación, y que cada cosa tiene su momento.
Hay momentos para estar con uno mismo, para entender la soledad, para vivir la autoestima, para reflexionar.
Y también, cuando entiendes la lección que esa etapa te ha enseñado, llega el momento de elegir, de saltar, de volar.
¿Hacia dónde? Hacia donde te indica tu corazón.
Hace poco leía en un texto que cuando no escuchamos las oportunidades que se nos presentan, las perdemos para siempre.
En parte es verdad, porque exactamente esa oportunidad no volverá, pero yo pienso que la vida está llena de oportunidades, para aquéllos que buscan incansablemente sus sueños.
No te rindas, persevera en tus sueños, busca en tu interior, crece, sonríe, ríete de la vida, y sobre todo disfruta del viaje.
Porque cuando la brisa de la vida sopla aires de cambio, es el momento de dejar ir lo viejo, y empezar a volar.
Y no te olvides que cuando tus sueños más grandes se conectan al corazón de la vida, siempre tendrán nuevas oportunidades para cumplirse.
Te deseo una semana maravillosa, llena de Amor, Plenitud y Sabiduría.
Un afectuoso saludo,
Manuel
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